
España espera un número récord de turistas para visitar sus costas soleadas, playas de arena y ciudades históricas este año, a pesar de que se prevé que los precios aumenten hasta un 20% este verano.
Pero el mayor reto del sector hostelero en estos días es encontrar trabajadores para intentar cubrir la demanda.
La pandemia es responsable tanto del afán por viajar como de la falta de confianza y entusiasmo de los trabajadores por la hostelería.
Los sectores del turismo y la hostelería esperan superar las cifras previas a la pandemia, cuando 83,7 millones de extranjeros visitaron el país. Los datos de la Alianza Hotelera Española revelan que las reservas para Semana Santa suben 20 puntos respecto al año pasado, y se espera que la ocupación este verano supere el 90%.
La empresa de recursos humanos Randstad estima que España necesitará al menos 60.000 trabajadores adicionales en el sector del turismo y la hostelería para hacer frente a la demanda.
Empresas punteras como Meliá han lanzado campañas en las redes sociales buscando jóvenes talentos allá donde puedan encontrarlos.
En Madrid, las escuelas de hostelería dicen que los alumnos tienen garantizado un trabajo tan pronto como se gradúen, si es que lo desean.
A pesar de la inflación y la incertidumbre económica y política mundial, España puede vivir la mejor (o peor) temporada de su historia hasta el momento.