El Primero de Mayo en València tuvo lugar en un ambiente tranquilo, con una manifestación convocada por UGT-PV y CCOO-PV que atrajo a aproximadamente 5.000 personas, según la Delegación del Gobierno. Los líderes sindicales expresaron su preocupación por la situación actual, destacando la importancia de mejorar los derechos laborales en un momento en que los beneficios empresariales son récord.
La jornada estuvo marcada por discursos que abordaron diversas problemáticas, desde la reducción de la jornada laboral hasta la infrafinanciación autonómica. Se hizo hincapié en la importancia de la democracia y la participación ciudadana ante las próximas elecciones europeas.
La presencia de la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, añadió un enfoque político a la jornada, destacando la importancia de seguir construyendo una sociedad mejor a pesar de los desafíos actuales. También se escucharon voces de la oposición, como el síndic de Compromís, Joan Baldoví, quien llamó a una reducción de la jornada laboral a 32 horas como horizonte posible para una vida más digna y feliz.
A pesar de la importancia de los temas tratados, se notó la ausencia de jóvenes en la manifestación, destacando la alta tasa de desempleo juvenil en la región valenciana. Grupos como Joves CCOO-PV promocionaron futuras movilizaciones, mientras que otros denunciaron la precarización laboral.
En resumen, el Primero de Mayo en València sirvió como espacio de reivindicación y reflexión sobre los retos laborales y sociales que enfrenta la sociedad actual, con llamados a la acción y a la mejora de las condiciones laborales y democráticas.